Nos acercamos a unas fechas del año donde, tradicionalmente, estamos celebrando dos acontecimientos que a veces se confunden:
- a) El día 1 de noviembre, celebramos el día de Todos los Santos
- b) El día 2 de noviembre, celebramos el día de Todos los Fieles Difuntos
Están relacionadas, pero se ha perdido el sentido profundo de estas celebraciones en las últimas décadas. Me gustaría ayudar a recuperarlo con este artículo, si me lo permitís.
En este contexto, me gustaría hablaros de una planta, de su resina y de su aceite esencial y su relación con la espiritualidad.
Una planta y sus extractos que no son especialmente conocidos por el gran público, a pesar de ser ampliamente empleados desde hace milenios y nombrada muchas veces en los textos bíblicos.
Me refiero concretamente a la mirra (Commiphora mhyrra var. molmol)
Es este un árbol (o arbusto según la dureza del lugar) originario de África oriental y la península arábica. En este caso, estaremos empleando la resina del árbol.
Como todas las resinas, es necesario que se produzca un corte o herida para que el árbol lo repare con ese pegamento maravilloso que tiene muchas y muy buenas propiedades terapéuticas.
Todas las resinas son en mayor o menor medida cicatrizantes para los humanos, como lo son para el ser que las genera, el árbol. Son regeneradoras, antisépticas, desinfectantes, como mínimo. Después, cada resina tiene sus propiedades características.
La mirra es considerada desde la antigüedad como una resina especialmente eficaz para curar heridas y cortes en la piel, empleándose como medicamento en las heridas de guerra.
Los soldados romanos la tomaban disuelta en vino para calmar los dolores físicos producidos por su ruda vida.
La mirra es, junto con el incienso, la resina de la que más veces se habla en la Biblia, y eso es porque era muy apreciada y valorada en aquella época por los humanos.
Aunque era empleada en sahumerios y rituales religiosos, para este tipo de ofrendas se valoraba más al incienso.
Sin embargo, la mirra era más valorada para cuestiones que tienen que ver con la piel, la salud y la belleza.
Era uno de los ingredientes de belleza más apreciados para preparar la piel de las que serían posteriormente, las esposas y concubinas de los reyes de aquel entonces.
Sabiendo que, en esa época, nada se hacía sin un sentido práctico, es de valorar el por qué los antiguos le daban tanto valor a esta misteriosa resina.
Mientras la resina del incienso es clara, amarillenta, la mirra es oscura, no llega al negro, pero si al marrón rojizo intenso. Contrastan mucho la una con la otra cuando se ponen juntas, tanto en aroma como en color.

En el Cantar de los Cantares, varias veces se le menciona como paradigma de dulzura y belleza.
Los Reyes Magos de Oriente, traen como ofrenda al Hijo de Dios oro, incienso y mirra: eso también nos indica la escala de valores del momento.
Además de ello, tanto los hebreos como los egipcios, la empleaban junto con otras plantas aromáticas, para embalsamar los cuerpos y protegerlos de ese modo de la putrefacción.


Esta aparente dualidad que presenta en su uso (relacionado con la vida, con la generación de la vida -relaciones amorosas- y con la muerte -embalsamamiento y entierros-) es otro de sus misterios, porque la mirra se nos puede presentar con diferentes rostros:
- Por ejemplo, es de aroma balsámico, pero el aceite esencial y la oleorresina pueden tener un punto aromático amargo, igual que en boca su sabor es amargo y luego, al rato, se transforma en dulce…
- Tiene un tacto delicado y cálido, pero es sumamente pegajosa cuando se seca…
- Puede gustar mucho o no gustar nada, especialmente para aquellas personas que nunca la han conocido en estado natural auténtico y sólo han experimentado fragancias de laboratorio a las que se les da ese nombre…
Para los creyentes, todo lo que Dios creó es bueno (Génesis 1, 31):
31.Vio Dios cuanto había hecho, y todo estaba muy bien. Y atardeció y amaneció: día sexto.
Y sin duda alguna, las plantas medicinales y las plantas que nos alimentan son muy buenas para nosotros. En este momento estamos hablando de la mirra y de su relación con la espiritualidad, porque para El Creador, esa dimensión espiritual siempre va ligada a la dimensión material. Si alguien las separa, somos nosotros en nuestra ignorancia.
Todo lo que creó era bueno, porque lo creó todo para que el ser humano viviese en el Paraíso. Por lo tanto, la mirra también es buena.
Pero la humanidad se extravió por voluntad propia, y en su soberbia, queriendo ser como Dios, se auto-expulsó de ese Paraíso. Y toda la Creación se vio afectada por el Pecado Original desde entonces y hasta la actualidad.
No obstante, el plan del Creador es que volvamos a Él. Por eso, el día 1 de noviembre, celebramos el día de Todos los Santos, porque ellos son nuestro modelo, con su ejemplo de vida, para que un día podamos estar de nuevo en ese Paraíso en la presencia de Dios.

Es un día de fiesta y es un día de esperanza para los creyentes. Porque nos conecta con la vida eterna. Si recordamos, dije antes que la mirra tiene esas dos facetas, que conectan con la generación de vida y con la muerte.
El día siguiente, día 2, el de Todos los Fieles Difuntos, celebramos por aquellas almas que se encuentran todavía a las puertas del lugar donde ya están los santos, para poder gozar de la inefable felicidad de estar frente a Dios.
Para los católicos, dichas almas se encuentran en un estado de Purgatorio, es decir, purificándose (purgándose) todavía de algunas faltas antes de poder estar, limpias y puras, en la Presencia del Todopoderoso.
Pedimos por esas almas y porque lleguen pronto a su destino final, ayudándoles mucho en su proceso con nuestras oraciones.

Es en ese contexto, espiritual (oraciones) y material (resina, aceite esencial), en el que tiene un sentido que podamos realizar una dedicatoria a nuestros seres queridos fallecidos con algún tipo de ceremonia especial.
La mirra nos puede ayudar a serenarnos y a conectar con nuestra paz (siempre y cuando la aceptemos y no nos produzca conflicto o rechazo) para poder orar y pedir tanto por todos los santos que nos han precedido y que nos dan ejemplo de vida, como de las personas fieles (conocidas o desconocidas) que pueden beneficiarse de nuestras oraciones para acabar antes su proceso de purificación.
No hay que verlo de forma supersticiosa ni mágica: el poder está en Dios y en la oración, no en las plantas para conseguir este tipo de cosas. Es fácil: ¿Quién tiene más poder, una planta o el Creador del Universo?
Pero las plantas nos pueden ayudar a estar mejor y a realizar el proceso de forma más pura y eficaz. Es por ello (entre otras cosas, siendo la principal el culto a Dios) que siempre se han usado sahumerios de plantas aromáticas y resinas en las ceremonias religiosas.
Pongo después del texto una sugerencia de propuesta de sencilla ceremonia para este día.
Piensa que, para las almas de nuestros seres queridos, es mucho más importante y beneficiosa (inmensamente más importante) la oración por sus almas que llevar flores a su tumba. Además, puedes hacerlo desde cualquier lugar del mundo en donde estés y de forma completamente gratuita.
Espero que podáis vivir estos días de gran belleza espiritual de una forma consciente, serena y hermosa.
El silencio, la oración y la naturaleza nos acercan a Dios y nos llenan el corazón con su armonía.
Que Dios os bendiga, que los santos nos inspiren con sus vidas ejemplares y que el Señor lleve a las almas de los fieles que todavía lo esperan, a Su Presencia.
Enrique Sanz Bascuñana
Propuesta de sencilla ceremonia para el día de todos los fieles difuntos
Una propuesta abierta para una ceremonia sencilla, que consistiría en colocar, en un lugar tranquilo de la casa, un pequeño altar. Es necesario poner un crucifijo, si se tiene alguna imagen de la Santísima Virgen María, también. Una vela blanca encendida y se puede poner una fotografía pequeña del difunto o difuntos por quienes oramos. Si no tienes foto, bastará con la intención en la dedicación de las oraciones.
Las oraciones más adecuadas para este día son:
- El Santo Rosario (Tradicional: Misterios Gozosos, Dolorosos y Gloriosos)
- Salmo 50
- Vía Crucis
- Oficio de Difuntos
Puedes elegir rezar lo que consideres más adecuado para ti. Hacerlo con respeto y devoción y dedicarlo a esas benditas almas es la actitud correcta.
Conviene confesarse y comulgar antes de orar (si se puede). Si no, puede hacerse una Comunión Espiritual.
Si precisas más información de dónde encontrar estas oraciones, puedes escribir a: enrique@institutoesb.com
Todo el equipo del Instituto ESB os deseamos un sereno y pacífico mes de noviembre.
2 Comentarios. Dejar nuevo
Gracias Enrique, es un regalo muy generoso lo que compartes en este artículo. Una información muy bella y excelente de espiritualidad y aromas tan exquisitos y valiosos como la mirra y el incienso. Gracias por tu tiempo y por este generoso y lindo texto
Todas las gracias A Dios, Sara, un abrazo grande!!!